Esta situación plantea un problema para la compañía, ya que Facebook debe respetar la ley federal estadounidense que establece que los sitios deben obtener el permiso formal de los padres antes de recoger datos personales de menores de edad.
Con el nuevo sistema, Facebook podría "blanquear" su amplia llegada entre los niños, atraídos sobre todo por las numerosas aplicaciones de juegos y la posibilidad de compartir fotografías.
Sin embargo, también se suscitan nuevas dudas sobre la privacidad de los usuarios más pequeños de la red. Fuentes cercanas a los dirigentes de la red social creada por Mark Zuckerberg refirieron que el mecanismo en estudio prevé vincular las cuentas de los niños con las de sus progenitores, de modo que los adultos puedan autorizar las amistades de sus hijos y las aplicaciones que pueden usar.
"Estudios recientes indicaron qué difícil es hacer respetar los límites de edad en Internet, sobre todo cuando los padres autorizan a sus hijos a acceder a los contenidos y los servicios de la red", subrayaron fuentes que hablaron sobre el tema con ejecutivos de Facebook, citadas por el Wall Street Journal. "Estamos en continuo contacto con los accionistas, autoridades y otros legisladores sobre el mejor modo de ayudar a los padres a garantizar la seguridad de sus hijos en una red en continua evolución", agregaron.
Según datos de 2011, al menos 7,5 millones de niños menores de 13 años usan el sitio, de los cuales cinco millones son menores de diez.